El 27 de septiembre se celebra en nuestro país el día del Odontólogo, los profesionales que se encargan del diagnóstico, tratamiento, prevensión y restauración de la salud oral. Son ellos también los que tienen la importante misión de concientizar sobre un tema que todavía no toma suficiente fuerza en la sociedad: la salud bucal.
En el Policlínico El Salto queremos agradecer a todos nuestros profesionales que diariamente trabajan por la salud bucal de los vecinos de Recoleta, devolviendo sonrisas que estaban ocultas por diferentes enfermedades y circunstancias.
El dentista Raúl Ferrada, quien trabaja hace 18 años en el Policlínico, cuenta que normalmente “los pacientes son personas muy «vulnerables» al entrar a la atención, por el susto innato al dentista, por lo que desarrollamos toda la psicología que el caso requiera, sin escatimar tiempo ni apurar el caso, con el mayor respeto posible. Escuchamos con atención todo lo que el paciente quiere contar de sus experiencias y explicamos claramente el plan de tratamiento propuesto, como si cada paciente fuese alguien de nuestra familia”.
Son muchos los vecinos de El Salto que han pasado por la atención de los especialistas. Solange Campos es una de las vecinas que se atiende con el Dr. Ferrada. “Estoy muy contenta porque antes me había puesto unas coronas en otros lugares y no había tenido muy buena experiencia, pero hace meses que me trato con él y me da mucha confianza. Además el precio es mucho más bajo y no sólo eso, también son muy amables, la atienden a uno como si fuera parte de la familia”, asegura.
La Odontopediatra Teresita Álvarez, trabaja desde el año 2011 en el policlínico. Su función: el cuidado integral de pacientes pediátricos y la atención primaria de adultos. “Para mí es muy especial trabajar acá porque se presta realmente un servicio odontológico y es lo que la gente valora, que son tratados con cariño, preocupación y que reciben un tratamiento de calidad. Muchos de ellos los atiendo desde que llegué y vuelven año a año a sus controles”, dice la dentista.
Úrsula Macaya es la mamá de una de las niñas que se atiende con la Dra. Álvarez. Cuenta que “la vocación y el profesionalismo de todos es espectacular, tienen mucha empatía para llegar a mi hija Vale y siempre todos están alegres y son muy acogedores”.
El Dr. Ferrada asegura que es muy emocionante cuando llega gente sin dientes que después del tratamiento “rompen en llanto y abrazos. Eso no tiene precio, los pacientes son los que nos dan la alegría y las ganas de seguir dando lo mejor de nosotros”.
De esta forma, queremos destacar el trabajo de todo el equipo de salud dental del policlínico y también felicitarlos por la importancia de su trabajo diario en la comunidad de El Salto. Invitamos a toda la comunidad a que se acerquen a nuestros especialistas que dan sonrisas de forma desinteresada.